COSAS QUE TE PASAN CUANDO CONOCÉS A LINIERS

Hay mucha gente que tiene el hábito de comenzar la lectura del diario de atrás para adelante, y el capricho se debe a que esas contratapas siempre han sido refugio de las historietas. Será que la gente prefiere las viñetas a los titulares, como quien devora el postre antes que la sopa hirviendo. Desde una de esa últimas páginas preferenciales saluda cada día Macanudo, la tira que abre una ventana de 15,5 por 5,5 centímetros para que el lector pueda expiar el universo que Liniers explora a machetazos limpios con sus plumas y pinceles.

entrevista y txt Marcelo León
fotos Luján Candio / Marcelo León / Guadalupe Planes /// Copyright 2008

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no escucha su historia, y sabiendo de su pasión por el cine, no tarda en imaginarlo haciendo dibujos a escondidas en los pizarrones de la Facultad de Derecho a la manera de Matt Damon y sus cálculos en Good Will Hunting (o más conocida como En busca del destino). “Yo empecé estudiando derecho, muy confundido con los humos de la adolescencia. Fue tortuoso. Dije “esto no es para mí, me voy a hacer mucha mala sangre, vamos a tratar de encontrar algo que me guste mucho”. Y ahí le apunté más a los dibujos. Vivía con angustia el saber que la carrera que eligiera sería aquello en la que iba a tener que trabajar todo el día. Sentí la responsabilidad de tener que elegir bien frente a toda la gente que no puede hacerlo. Creo que si en esa elección ponés primero lo económico, se te corre la mira. Por eso jamás lo tuve en cuenta. Claramente no iba a poder vivir de hacer historietas, por lo menos no muy bien, pero sabía que así lo iba a poder seguir haciendo”.

PM: ¿Dibujás desde muy chico?

L: Siempre dibujé cuando era chico, y todo se fue dando como una especie de escalerita.

Comencé haciendo historietas muy mal, tuve que ir aprendiendo. Cualquier disciplina artística hay que desarrollarla hasta transformarla en el propio lenguaje. Solamente la gente muy genial logra eso en sus primeros laburos, y no era mi caso.

Subiendo esa escalerita se encontró providencialmente con Maitena, y significó un salto de veinte casilleros, si se permite la “contrametáfora” del juego de mesa. Liniers venía publicando semanalmente Bonjour en el diario Página 12, hasta que la creadora de Mujeres Alteradas lo presentó en La Nación. Desde 2002 la tira Macanudo se publica diarimente en ese matutino, y entre los varios desafíos a afrontar, estaba en juego el necesario ida y vuelta con el lector.

“La tira sale como soy yo, tiene mi sentido del humor. Los artistas que me gustan y que me influencian están ahí, muy presentes, Y si un día estoy arriba y feliz hago un chiste simpático, Enriqueta, y todo lindo, y si un día estoy más complicado, aflora como un chiste existencialista bizarro…

Para mí en estas cosas no podés trabajar desde una pose porque enseguida se te empiezan a notar los hilos. Hay temas sobre los que me pregunto con frecuencia, y en Macanudo salen muy seguido, desde el por qué estamos acá hasta por qué dos personas se hacen amigas.”

El elenco estable de Macanudo es muy especial, ya que el autor tiene controladas las peleas por el cartel. En las antípodas del vedettismo conviven comunidades de pingüinos existencialistas, ovejas bailarinas y duendes poderosos, con personajes que ya se han ganado un nombre propio, como la aceituna Oliverio, Z-25 el robot sensible, Alfio la bola troglodita, Martincito y su amigo imaginario Olga, y la pequeña Enriqueta, su gato Fellini y Madariaga, su osito catatónico. Y el juego implícito que propone la tira está en ver quién o qué aparece cada mañana al desplegar el diario, y el abanico puede incluir desde Cosas que a lo mejor le pasaron a Picasso hasta las Verdaderas aventuras de Liniers, en donde el autor, autorretratado con unas enormes orejas (vaya uno a saber por qué) protagoniza la acción. A mí me gusta el humor autorreferencial. Me encantan Seinfeld, Robert Crumb, tipos que usaron sus vidas para armar su obra. Es una clase de humor que yo necesito hacer.”

Mirando por la ventana

No se había mencionado que esta entrevista se llevó a cabo en el departamento de Liniers. Allí vive con su esposa, la escritora Angie Erhardt del Campo, que para esos días estaba en la dulce espera de Matilda, la primogénita que nació el 6 de marzo, y a quién más de mil personas le dejaron su saludo en el blog del dibujante, macanudoliniers.blogspot.com. En esa casa, que pronto se llenará con los juguetes de la niña, ya habitan los cientos de libros de sus padres, que junto con dibujos, pinturas, chiches y recuerdos conforman la utilitaria deco del hogar. Allí también está su mesa de trabajo, de frente a la ventana de calle, desde donde llega la luz que acaricia los lomos de una pila de ediciones extranjeras que ya no caben en los estantes.

PM: Cuando te preguntan por tus influencias, la lista que contestas parece interminable.

Pero tiene que haber algún autor que te impacte por demás.

L: Hay uno que vendría a ser como el James Joyce de la historieta actual. Es norteamericano, se llama Chris Ware ¡y lo odio con toda el alma! (Risas) Es increíble su búsqueda de la perfección editorial, tan obsesiva por los detalles. Y es muy genial como escribe, no se queda nada más con el diseño. Todavía no me recupero de los palazos que me pega este tipo.

PM: En tu blog, mostrás mucho de tu vida en dibujos, y en ellos aparecen tus gustos y tus amistades. Muchos visitantes han descubierto a artistas gracias a tus referencias.

L: Eso me encanta. Cuando algo me gusta soy el típico molesto que quiere que el mundo lo comparta. Me acuerdo que en la secundaria yo estaba fanatizado con Tom Waits, y les decía a mis amigos “¡Tenés que escuchar a este tipo!”, y ellos me decían “¡Pero canta como Alf!” Ellos preferían U2… (Risas). Cuando me gusta algo realmente quiero que se esparza.

PM: ¿Se viene el disco de Liniers & Friends?

L: Mientras Liniers no cante… podría ser. (Risas) Sería divertido. Tengo varios amigos musicales, por esa cosa de que me gusta mucho la música y no tengo ningún talento. No tengo ritmo y no puedo armonizar. Son mis dos problemas. (Risas) Para mí ellos son superhéroes, tienen como un poder que yo no tengo. Las chicas saltándoles encima mientras ellos me dicen “me gustaría dibujar como vos…” ¡Mentira! (Más risas).

PM: ¿Por qué la preferencia por los cantautores?

L: Necesito la historia. La literatura. Dylan. Me gustan un montón de bandas, empezando por los Beatles, pero en el cantautor encuentro la cosa personal, que se ma hace más lejana en una banda.

Liniers ha hecho varias portadas de discos, de las cuales las más emblemáticas son las de Logo, de Kevin Johansen y la de La lengua popular, de Andrés Calamaro. Que sumadas a las numerosas participaciones en distintas revistas (Hecho en Buenos Aires, La Mano, ADN Cultura, entre otras), más las recopilaciones de sus tiras y sus correspondientes ediciones en Latinoamérica y Europa, permiten comprender que eso que muchos creen como un hobby está más cercano a un sacerdocio. Pero la profesión tiene muchas alegrías aparejadas, que incluyen los viajes. Y para un tipo obsesionado con hacer volar a los pingüinos, la Antártida era la oferta irrenunciable. “Ir a la Antártida es como ir a Saturno. Mi sueño del pibe”. De cada uno de sus viajes surgen los Cuadernos, bitácoras dibujadas que capturan con una sensibilidad distinta a la de una filmadora o una camarita digital. Conejo de Viaje es el libro que compila esos viajes, y en estos días llegará a las librerías argentinas.

Luján Candio

Cosas que nunca te preguntaron en un reportaje

PM: ¿Tu juego de mesa favorito?

L: Ese es un tema que tenemos con Angie. A ella le gustan mucho todos los juegos de mesa… y yo los odio. (Risas) Me pongo muy nervioso, este quiero ganar a toda costa…

M: ¿Y el Pictionary?

L: Supuestamente ahí yo debería ser el campeón, contra mis amigos que no pueden dibujar ni un palito, pero en el Pictionary no se trata tanto de dibujar bien sino de transmitir una idea muy rápido. Y también depende mucho del interlocutor. Entonces vos dibujas perfecto todo el planeta tierra en tiempo record y tu compañero lo mira con la mano en la barbilla diciendo mmmm… entonces la diversión se va al demonio (Risas).

PM: Si tuvieras el don de crear un artefacto que no se haya inventado ¿Qué inventarías?

L: El otro día vi un capítulo de Homero Simpsons en el que quiere copiar a Thomas Edison, y lo mejor que inventa es una escopeta, que la llena con maquillaje, para maquillar rápido a la mujer. Y le apunta con la escopeta a Marge y le dice “Quedate quieta…” (Risas). Que inventaría… Inventaría cosas básicas que no entiendo porque no existen, por ejemplo una bombita que no se queme nunca. No sé por qué tengo que estar todo el día cambiando bombitas. Inventaría algo que no se rompa. Antes se compraban las radios del tamaño de una mesa y treinta años después seguían funcionando. Cuando me casé compramos todas las cosas electrónicas, y al año y un día, porque la garantía duraba un año, colapsó toda la casa. Pareciera que todo está hecho para romperse.

PM: ¿Qué personaje de Los Simpsons te gusta más?

L: Descontando a Homero, que es el obvio, tengo uno que aparece y ya estoy riéndome, que es Millhouse. Hay como una identificación ¿no? Las cejas anchas, los anteojos, esa cosa de perdedor que tiene… Tendrían que hacer El show de Millhouse.

PM: Uno de los personajes de Macanudo es el tipo que le cambia los títulos a las películas.

L: Si, personaje demoníaco.

PM: Inspirado en él, ¿a qué película le cambiarías el final?

L: A Annie Hall. Siempre me dio lástima el final. Mi final sería el final malo, desde el punto de vista estético y creativo y artístico pero sería el final que me dejaría contento. No quería esa separación… (Risas) Pero bueno, Woody Allen es mejor escritor que uno…(Risas)

Saludo final

Ya en la puerta del edificio, violín en bolsa y con los ruidos del mundo exterior avecinando, surgió la pregunta que había quedado en el tintero.

PM: ¿Alguna vez te llevaron algún libro de otro autor para que lo firmes?

L: (Presto a abrir la puerta se detiene, pensativo) Sí. Una vez vino una chica con un libro de Borges…

PM: ¿Y…?

L: Yo le dibujé un duende…


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4 pensamientos en “COSAS QUE TE PASAN CUANDO CONOCÉS A LINIERS

  1. Vaya! Qué entrevista tan increíble!! Esto es lo que le falta a taaantos periodistas!! Tiene una secuencia narrativa increíble, se sale de lo común, es amena, graciosa, descriptiva sin ser tediosa sino, al contrario, fascinante; le hace a uno estar ahí!
    Felicidades! Realmente felicidades!! Estoy asombrada! Estudio periodismo y realmente considero que esta entrevista es un modelo a seguir! Aquí está plasmada la revolución del periodismo, considerado aburrido por muchos! BRAVO!!

  2. Pingback: El mundo de Liniers | Misceláneos | Revista Letra Media

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